Del 19 al 21 de septiembre en Mocoa, Putumayo, representantes de comunidades campesinas, indígenas, afrodescendientes y estudiantes de los municipios con mayores índices de deforestación de los departamentos de Caquetá y Putumayo, conocieron el Museo multisituado, vivo y activo de la selva Amazónica, una propuesta pedagógica basada en el conocimiento tradicional de los mayores indígenas sobre el bosque, el cual se transmite a niños y jóvenes a través de la dinámica de un museo de madera interactivo e ilustrado.
Cerca de 400 personas participaron en este evento que se realizó por primera vez en Mocoa, entre ellos, jóvenes de instituciones educativas de Remolinos del Caguán, Caquetá y Puerto Guzmán, Putumayo; promotores ambientales de Puerto Asís, Guardaparques, Asociación de comunidades forestales de Puerto Guzmán – ASOFORES, líderes indígenas y de comunidades Afro de este departamento.
Este proyecto, liderado por Tropenbos Internacional Colombia y apoyado por Corazón de la Amazonia, cuenta 400 muestras de árboles recolectadas y descritas por 20 indígenas de la Amazonia colombiana. Una estrategia que permite interactuar con los más pequeños, estudiantes, docentes e investigadores sobre la complejidad de la selva Amazónica, a través del reconocimiento del nombre de las diferentes especies de árboles, detallar sus usos y las relaciones que tienen con los animales, plantas, suelo y agua.
En el sur de la Amazonia colombiana existen alrededor de 36 pueblos indígenas distribuidos en los departamentos de Amazonas, Caquetá y Putumayo, los cuales tienen sus propios resguardos o están constituidos en cabildos o comunidades sumando alrededor 9.9 millones de hectáreas de los 22.6 millones de hectáreas de la jurisdicción de la Corporación. Por razones como la diversidad cultural, de pensamiento, de sistemas tradicionales de autoridad, enseñanza y aprendizaje sobre el manejo ambiental, es necesario implementar estrategias acordes al contexto amazónico.
Para CORPOAMAZONIA el Museo es una oportunidad de avanzar con la comunidad en acciones pedagógicas, para evitar que la tala ilegal siga afectando a un ecosistema tan importante para el país y el mundo; además de repensar en las estrategias convencionales de educación ambiental, las cuales deben tener un enfoque en el conocimiento ancestral de quienes habitan en la Amazonía.
El Museo de la Madera se constituye como llamado para cuidar las selvas amazónicas, ya que después compartir información sobre la importancia de los árboles, cuesta trabajo pensar en un árbol quemándose en la Amazonia. Hasta el momento, con el apoyo del programa GEF Corazón de la Amazonia, la Fundación Tropembos ha logrado enviar una gran colección de museos de la madera a dos escuelas indígenas de la Amazonia y continúa llevando esta iniciativa con apoyo de CORPOAMAZONIA, el proyecto de USAID “Amazonia Mejores Prácticas Socioambientales”.
Fuente: Nicolle Ferrin Corpoamazonia
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